El Triángulo Dorado de Oriente

Como muchos saben hace poco estuve en la India. Hoy no es tan extraño que occidentales estemos deambulando por estos lejanos rincones de la tierra, pero sigue siendo atractivo que lleguemos hasta allá.
Fui a la boda de un amigo, (no, no fue como la película de Julia Roberts ja!). Una experiencia tan habitual y normal para mis amigos indios pero tan exótica y distinta para mi. Fue increíble. Aunque a veces la gente prefiere contar las vivencias a través de fotos, yo quiero intentar apotarles algo por acá. 

¿Qué fue lo que más me gusto de la India? No se como responder esa pregunta, que todos me hacen por cierto. La verdad creo que lo que mas me gustó fue la experiencia de compartir y vivir todo lo que conlleva una ocasión tan importante como una boda. Me sentia como en una versión bollywoodense de My Big Fat Greek Wedding, pero india. Todos los preparativos, celebraciones, comidas, viajes y logistica era asombrosa. Cuando digo "logística" me refiero a todo lo que tenia que ver con viaje, comida, carros, equipaje y demás. El asunto es que las fiestas eran en ciudades distintas y tuvimos que viajar tanto en carro como en tren (toda la noche), y éramos alrededor de 20 personas viajando juntas. No se ustedes, pero yo imagino mi familia viajando así y se que va ser un desorden, no porque seamos desordenados pero típico que todos quieren opinar, las mujeres dando direcciones a los hombres, y ellos haciendose los locos, los niños haciendo caso omiso a las ordenes que les dan, cada quien en lo suyo, nunca estaríamos listos a la hora etc. En este caso no fue así, aqui cada quien asumía su rol y lo cumplía a la perfección, INCREIBLE! primero viajamos 4 horas en carro hasta Delhi, donde tomaríamos el tren. Salieron 5 carros, puntual, cada quien se subió al que le tocaba y no andaban con show de "me subo aqui", "me subo allá", "quiero la ventana", a donde los enviaba el lider de la unidad ahi se quedaba. El lider de la unidad, así lo bautizamos y muy bien le quedaba el apodo. El cuñado de mi amigo es piloto del ejercito indio así que tenía dotes para dar directrices y sumado a eso usaba unos Ray Ban que le hicieron ganar otro apodo "Top Gun". Era un genio!


Bueno, dejando a un lado la super boda, también hubo otras cosas emocionantes durante nuestro viaje. Rishikesh fue mi destino favorito, es asombroso estar en medio de tanta paz, y notar la diferencia del caos de las demás ciudades que visitamos.Este pueblo lleno de yogis y babas por todos lados. Los babas o sadhu son los que visten batas naranjas y practican meditación con el fin de alcanzar la última etapa del Hinduismo que es la liberación. Son impresionantes, y no puedes dejar de verlos y preguntarte qué cosas pasan por su mente...si es que están "ahí" o tal vez más "alla".


Caminas por la calle principal y ves un centro de yoga cada 2 metros, para todos los niveles y en especial para profesores. La vibra de este lugar es mágica, llena de paz y buena onda. Te hace reflexionar acerca de mucho y nada. Es una meditación por sí sola el solo estar ahí. Sin olvidar mencionar que desde Rishikesh sale una de las vertientes del río Ganges, que tiene un color impresionante, como turquesa, y la arena es blanca. 

Es mucho lo que hay por recorrer en la India, y es mucho el tiempo que necesitas para conocer y degustar la cultura a un 100%. El norte es muy distinto al sur por ejemplo. Las regiones cambian no sólo por su geografía sino también la religión. Los lugares que visité yo forman el conocido "Triángulo dorado", Delhi, Agra y Jaipur. Y otras ciudades como Aligarth, Bopal y Haridwar. Para cerrar con broche de oro quisimos dejar Delhi para el final y recibir el año nuevo ahí, 10 horas antes que nuestros familiares y amigos del Occidente.  

Obviamente es mucho más lo que podría contar pero les soy sincera, no se como hacerlo de una manera resumida sin quitarle detalles necesarios para que ustedes puedan apreciar la majestuosidad de este país...India.  

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